La semana pasada, HMD Global (la compañía detrás de Nokia) presentó el Nokia 8.1 en Dubai, un teléfono que se presentó inicialmente como Nokia X7 para países asiáticos y que ha acabado llegando al mercado internacional con el nombre de Nokia 8.1.
El nuevo Nokia 8.1 no es un sucesor del Nokia 8 o Nokia 8 Sirocco en términos de especificaciones y tampoco está en el mismo segmento de los buque insignia. La nomenclatura puede confundirlo, pero esencialmente, el Nokia 8.1 es el sucesor del Nokia 7 plus – un segmento que a la compañía le gusta llamar «premium asequible».
En la parte delantera encontramos una pantalla Full HD+ de 6,18 pulgadas con una relación de aspecto de 18,7:9 y 420ppi. Es una pantalla compatible con HDR10, con ‘notch’ y bordes mínimos, lo que hace del 8.1 que tenga una pantalla más grande que la del Nokia 7 plus.
El terminal se presentó inicialmente con 4GB de RAM y dos opciones de almacenamiento interno. Había una versión con 64GB y otra superior con 128GB de almacenamiento interno, ambas ampliables mediante una tarjeta microSD. Pero ahora se ha sabido que una nueva variante viene de camino al mercado, una que llevará la RAM hasta los 6GB y que aterrizará en enero.
Por ahora poso se sabe del precio para el Nokia 8.1 superior, pero sabiendo que el Nokia 8.1 básico se situó en Europa en los 399 euros, lo lógico es pensar que el modelo con 6GB y 128GB debe ascender hasta los 500 euros.